Acercándonos

Atrás ya se ha quedado todo un año de actividades, obras de Caridad, cultos internos y demás, una año, en el que hemos tenido un sinfin de vivencias, todas ellas entrelazadas con un crecimiento de amigos, que sumamos a los ya conocidos en este maravilloso mundo de las cofradías, como el presidente de la Cofradía del Cautivo y la Salud de Dolores o la nueva asociación parroquial de Almoradí. Ahora, toca el momento de preparar, enfocar prácticamente toda la visión en lo que nos viene por delante. Febrero a penas si tiene más que la Sabatina de mediados de mes, en la que, a más de uno se nos está haciendo eterna su llegada. Y ya Marzo, preparar el Quinario de la Virgen, la imposición de la corona, y el nombramiento del nuyevo cargo Honorífico de la hermandad. Y como mucho, desde actividades preparar el regalo para el día de San José con los niños de la cofradía. Y es que toda la atención se debe prestar, casi en exclusiva a los cultos que nos quedan, porque, si importante es el Quinario de la Virgen, pues se expande la fe y la devoción hacia la Virgen de aquellos que asisten a misa, más aún de importante es la estación de penitencia del próximo Domingo de Ramos, que a vista de nuestra hermandad es la forma de acercar a aquellos que no van a la Iglesia más que para bautizos comuniones y fiestas en general, la fe y la devoción. Recuerdo perfectamente como varios miembros de neustra cofradía, nada más hacerse hermanos nos dijeron : - Yo llevo sin ir a misa desde que me confirmé-. Habría que preguntarles ahora, cuantas veces llevan pisadas la Iglesia, y sobre todo participado en ofrendas y demás. Y es que es el principal fin de una cofradía, el enseñar que no es nada malo, acercarse a aquellas cosas, que te llenan el corazón de una alegría tan desbordada que por narices la tienes que tránsmitir.