lunes, 11 de julio de 2011
Continuamos
Tras un par de días sin escribir volvemos a la carga. Y es que pese a que la actividad en el blog a menguado pues, se ha cerrado ya el curso cofrade y poco nos queda que contar hasta su apertura, la actividad este año no se corta, pues el coro Rociero sigue en marcha, pues este Sábado volvemos a tener doblete en Crevillent y Orihuela, y en este último además, con recibimiento a la novia en su puerta, que va a ser una verdadera gozada, y al mismo tiempo, continuamos llevando el Kiosko del parque de la huerta, que, aunque solo se abre para los días que más actividades hay como el pregón de moros y cristianos, o los conciertos etc... ahí estamos al pie del cañón, por otro lado y desde el área de Caridad, aun que ya se pasó por carta a los cofrades, y estos respondieron bastante bien, ahora se va a pasar a informar al pueblo, de la campaña de recogida de alimentos que tendrá su fin en Septiembre, y que sin duda, pretendemos que sea igual o mejor que la del año pasado, y es que este es uno de los pilares fundamentales de la hermandad, la Caridad, que junto a la fe, guía nuestra hermandad. Además, este fin de semana también hemos mantenido una muy buena charla con nuestro gran amigo y orfebre Samuel, de orfebrería Villena que ha hecho verdaderas maravillas, y que ya pueden ver en su página web como es un cáliz y la restauración de una joya de la Iglesia de Villena, una custodia, donde entre otros detalles, destacamos partícularmente la alegoría del amor, que a mi personalmente me encanta: el Pelicano que se rompe el pecho para dar de comer a sus crías, se sacrifica por sus hijos, aludiendo al inmenso amor de Jesús al sacrificarse por nosotros. Como os podeis imaginar las charlas con Samuel fueron una verdadera maravilla, que, y aunque, en estas fechas de sol, playa, arena y días que no terminan, cuesta imaginar esas maravillosa fecha de la cuaresma, cuando nos juntamos con verdaderos cofrades de corazón y que sienten tanto su trabajo como este orfebre, es fácil sentir una buena levantá, y embriagarte del olor del incienso.