Muchos han sido los que en el último día se han interesado por la imagen de nuestro titular, Nuestro Padre Jesús de la Salud, busquedas por internet y preguntas a nuestros cofrades y pese a que, los que saben indagar habrán encontrado la imagen en barro, poco se parece ese primer boceto al actual, policromado, y con un realismo Sevillano impresionante, que sin duda no va a dejar impasible a nadie, y aunque la noticia ha corrido como la polvora, lo cierto es que no postearemos en el blog la imagen hasta su llegada a nuestro pueblo, que pretendemos que sea algo memorable, lleno siempre de fe y religiosidad, como debe ser, con una presentación y bendición en condiciones, dignos de su divinidad. Lo que si podemos detallar ya, algo que muchos conocen, es la iconografía del mismo, ya que poco misterio tiene: Se trata de una imagen de Jesús "Nazareno" con una gran zancada como la de Gran Poder, lanzando el pie izquierdo hacia adelante, y con la cruz cargada en el hombro izquierdo, pero con la cruz invertida, tal como estipulaban las imagenes de Jesús antes del SXIII, y que posteriormente restauró el estilo Manierista y que en la actualidad la podemos ver en la Hermandad del Silencio Sevillano entre otras, dicha iconografía aparece por primera vez en el Sarcófago 171 del Museo Pio Cristiano del Vaticano del S.V, y era la iconografía más usual de representar a Jesús cargado con la cruz, tambien se detalla en la catedral del El Burgo de Osma en Soria
además la importancia de dicho momento, en el que Jesús abraza la cruz, aceptando su destino, aceptando todos los pecados del mundo, y dejando su vida en manos de Dios, alude perfectamente al fin que busca nuestra hermandad: "toma tu cruz y sigueme" y el nombre que nuestros cofrades aceptaron para nuestro titular "de la salud", es idóneo, ya que cuando la Salud falta o tenemos problemas, debemos aceptar lo que venga tal como hizo Jesús, y esta imagen nos enseñará a que, podemos acudir a él cuando lo necesitamos que siempre nos escuchará y además nos enseña a aceptar lo que venga, pues el bien siempre prevalece ante cualquier mal, por muy doloroso que sea el momento, y aunque no lo entendamos, aunque nos veamos desolados, Él nos enseñó: Jesús, cordero de Dios, sufrió por nosotros, hasta su muerte y resurrección y con ello demostró lo grande que es Dios viviendo siempre en su amor.
La imagen es de talla completa policromada completamente, y con una busqueda total de la piedad, pues el gesto totalmente desconpuesto roza la divinidad en una mirada totalmente humana. Ciertamente el nombre de la cofradía, ahora, es altamente piadoso pues las dos advocaciones juntas la del hijo y la de la madre SALUD Y ESPERANZA, son ,amen de otras cosas, un refugio para el que los necesita.