Gracias a Dios y a nuestra bendita madre, este año, y después
de 4 años, hemos podido volver a disfrutar de nuestra patrona desde muy
cerquita todo este fin de semana.
Todo empezó el viernes por la noche alrededor de las 22.30h
con el espectáculo rociero “camino al rocio” amenizado por nuestro coro rociero
que junto con el grupo de sevillanas “Tierra Blanca” y con la profesora de
baile mari Carmen Simón, hicieron que todos los asistentes se trasladaran al
rocio durante una hora y media que duró aproximadamente, se alternó el baile de
las sevillanas, junto con actuaciones del coro. Y para poner punto y final,
primero el coro cantó la sevillana “A Bailar” para que el grupo de sevillanas
bailara con nosotros. Y como colofón se terminó cantando la salve del olé a
nuestra patrona , cuando apenas faltaban
segundos par las doce de la noche junto con la colaboración del grupo de
sevillanas y de todos los allí presentes. Fue una actuación muy emotiva en la
cual se cantaron 9 canciones que iban narrando como es el camino del rocio, los
senderos, el quema y la leyenda de la aparición, entre otras. Una de las que
más no llegó fue en el momento que la reina de las fiestas Alicia, su dama de
honor Alba y la reina infantil María Del Mar (componentes de nuestro coro), nos
cantaron “Cuando mi voz destaca”, canción que emociona a todo aquel que lo
escucha y esa noche no fue menos ya que hicieron emocionarse a todos los allí
presentes con esas voces tan bonitas y dulces como ellas. 
En la tarde del sábado tubo lugar la ofrenda de flores a la
patrona, en la cual nuestra hermandad participó y varios de nuestros hermanos
junto con el hermano mayor ofrecieron alimentos. Al finalizar esta, se continuó
con la misa de campaña donde también estuvieron representante de nuestra
hermandad y hermanos.
El domingo alrededor de las 17h. empezaban las carrozas, donde nuestro coro y junto a otros miembros de
nuestra hermandad, salimos ataviados con nuestros trajes rocieros dispuestos a
pasarlo en grande, disfrutando, cantando, bailando y ofreciendo a todos los que
se encontraban viendo las carrozas, jamón y rebujito. Nos lo pasamos como niños
y no teníamos ganas de que se terminaran, de tanto que se estaba disfrutando. Nada
más llegar a la calle ancha los que allí estábamos nos fuimos a regalarle
nuestra tradicional serenata a la patrona que ya estaba esperándonos, preparada
en su trono para la procesión. La virgen del Rosario estaba increíble,
espectacular, sonriente alegre como
nunca antes la habíamos visto. A las 21h. daba comienzo la procesión, que a
hombros de los costaleros de Santiago,
de entre los cuales varios son miembros de nuestra hermandad, y con su capataz José
Tomas, la han llevado como solo ellos saben, por todas las calles del pueblo, y
como novedad, este año lo han realizado llevando puesta la medalla de la virgen
del rosario que les ha sido impuesto antes de salir la procesión. Al terminar
se le ha entonado su himno y lanzado varios vivas como ella solo se merece. 
Y como
punto y final de estas fiestas el espectacular
castillo.