
Desde las 9 de la mañana que comenzamos a igualar el paso y hasta las 12 del medio día todo fue colaboración. Muchos fueron los costaleros de ambos pasos que a lo largo de la mañana se acercaron a prestar su ayuda para estos momentos de duro trabajo. Se igualó de la misma forma que el año pasado, pues fueron muchos los costaleros que el pasado año nos repitieron que el paso de palio no pesó prácticamente nada, y eso es bastante importante. Dado que el paso de cristo tiene las mismas características que el de palio, se igualará de la misma manera este año.
Esto un reto el proceso de la igualá dado que nuestra hermandad crece en un pueblo del levante Español con poca tradición costalera, la igualá de las trabajaderas es complicada, porque es prácticamente imposible decirle a alguien que no, ya sea por altura o por otros temas. Por eso mismo, nuestros capataces se las debe de ingeniar, para igualar a personas de entre 165 y y 1,20 . Siempre respetando, en la manera de lo posible, las preferencias de los distintos cofrades, de palio o Cristo. No consta que no solo es en nuestros pasos donde ocurre esto, si no en otros muchos, por ello nos quitamos el sombrero ante estos capataces. Lo sencillo siempre es igualar una cuadrilla homojénea, entre una medidas, como máximo de 7 cm de diferencia, o hasta incluso tener la posibilidad de decirle a costaleros que no, por su altura, dado que hay mucha reserva. Eso siempre es lo sencillo, lo difícil es hacIger verdaderos malabares para poder salir a la calle con lo que Dios nos permite. Por ello gracias a los costaleros que año tras año quieren salir portando a nuestros venerables titulares, e infinitas gracias a los capataces y demás ayudantes por entregar gran parte de su tiempo a la cofradía igualando y cohesionando.

Por último os recordamos que hoy será el ensayo de nuestro coro rociero.